sábado, 11 de agosto de 2012

Sublime.

Sonrisas. Ni por la mañana ni al dormir. Aleatorias. Por todo y por nada. Qué manera de perder el tiempo. Y la cabeza. Desgastar-nos la barra de labios. Para qué. El color no la hace más bonita. Comiéndotelos a tirones y brotando sangre. Qué color. Rojo. Pasando cerca (de él) y mordiéndomelos. Hace daño. A él le gusta. No son sentimientos, son ganas. Tocando en tu paladar la última balada y sonriendo después. Olvido lo importante. Y vuelvo a rozarlos. Como en un piano. Supongo que son sonrisas entre motivos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario